Preparar una merienda-cena suculenta y terrorífica para la fiesta de la noche de Halloween es muy fácil. Los niños pueden ayudar en la elaboración, con lo que se divertirán mucho más. Los temas de los platos tienen que ser lo más espeluznantes posibles: ojos, gusanos, dedos...Todo ello elaborado con mucha imaginación utilizando los ingredientes que tenemos a mano. Desde facilisimo.com te mostramos unas cuantas recetas que hemos preparado, la mayoría de las cuales han surgido de ideas aportadas por foreras como Nunu o Alvarado. Arreglar una calabaza en muy poco tiempo es complicado. ¿Qué os parece si hacéis una imitación usando para ello un tomate? Ayuda a tu hijo en esta tarea para que no se corte. Con un cuchillo cortamos la parte de arriba, vaciamos el tomate (la pulpa la podemos guardar) y hacemos los ojos, la boca y el resto de la decoración. En lugar de poner una vela, podéis rellenarla de ensaladilla o de lo que más os guste.
Con un poco de papel de aluminio puedes conseguir que tus tostadas tengan la imagen de un fantasma tan divertido como el de la foto. Eso sí, las tienes que hacer en el horno para que se tuesten de esa forma. También puedes hacer sándwiches con forma de lápida. Nosotros, en este caso, hemos hecho una tostada que hemos decorado con regaliz negro.
Todas las figuras que representen monstruos, extraterrestres o criaturas extrañas
son bienvenidas este día. Deja que tu hijo haga alguna con ingredientes
sencillos. En nuestro caso, hemos preparado un simpático muñeco
empleando huevo duro y tomate para el cuerpo, clavos de olor para los
ojos y salchicha y perejil para el sombrero. Todo vale y dejar que los
pequeños lo hagan aviva su imaginación. Tomado de: cocina
facilisimo.com
